Teniendo en cuenta el inicio de la época de avaluaciones, queremos aprovechar este pequeño espacio para darte unas pautas que buscan ayudarte en la presentación de tus exámenes.
Primero que todo tenemos que tener en cuenta la disposición del tiempo. Cuando estés organizando tus tiempos para preparar las evaluaciones, debes observar con claridad los lapsos específicos que usarás para cada una de las materias y para descansar entre focos de estudio. Por ejemplo: estudiaré una hora y descansaré diez minutos, o haré un bloque de media hora y descanso 5 minutos. Cada estudiante tiene una organización propia, sin embargo, te recomendamos configurar bloques entre 40 minutos y una hora con breves descansos (5 a diez minutos) entre bloques, ya que este tiempo sostiene de mejor manera la concentración.
Esta disposición temporal debe ir estructurada junto a la cantidad de evaluaciones que tendrás. Es más importante dedicar adecuadamente el tiempo y que sea de calidad, más que sea una amplia cantidad. ¡Tip Importante! Si determino que estudiaré durante varios días en un horario específico para una evaluación específica, debo completar ese proceso, pues mi cerebro entiende la importancia del mismo y se prepara para una comprobación final.
En segundo lugar, es muy importante tener en cuenta los espacios de estudio. Si vas a estudiar selecciona un lugar específico porque tu cerebro identifica siempre el mismo lugar como el único en el que vas a llevar a cabo dicha actividad. Si, por ejemplo, seleccionas el estudio de tu casa, cada vez que te acerques a dicho espacio todo tu cuerpo (especialmente tu cerebro) se adaptará para entrar en un modo de estudio, es semejante a un cambio de “switch” que favorece tu concentración y tu capacidad de retener y analizar conocimientos.
En tercer lugar, debes contemplar tener todas tus herramientas cerca y estar satisfecho en tu alimentación ya que las pequeñas interrupciones que se pueden presentar por la búsqueda de útiles o de un vaso de agua rompen el estado de concentración propio de tu tarea de estudio.
Es recomendable que ya hayas comido algo previamente para que no sientas necesidad de buscar alimentos o de llevarlos a tu espacio de concentración, de lo contrario puedes cruzar la información que tiene tu cerebro respecto a los espacios y terminar comiendo en dicho espacio. ¡Tip importante! El tiempo que has elegido para estudiar debe ser respetado en su totalidad.
En términos mentales debo estar descansado, sin presión, sin angustia. Es mejor no estar sobre prevenido acerca de lo que voy a preparar al momento de estudiar, una noción clara del método de estudio y de los tiempos utilizados en ello facilitará grandemente el alcance de cualquier meta académica.
La atención y la concentración se pueden alcanzar si ponemos todas estas recomendaciones en práctica, sumando, además, la conciencia ante los distractores que me suelen alejar de mi objetivo de estudio. Cada uno de nosotros conocemos qué nos distrae más, de qué manera podemos perder el foco en el estudio, por ello debemos buscar evitar dichos distractores o buscar ayuda para sacarlos de nuestra zona cercana.
Emocionalmente, es pertinente estar tranquilo al momento de iniciar mi preparación, por ejemplo, puedo hacer un poco de deporte previamente a mi estudio, ya que esto me ayudará a equilibrarme de forma general. De igual manera puedo hacer una técnica de sofrología que me ayude a concentrarme. También debo mentalizarme a lograr mi meta de excelencia académica por medio de mi estudio, este enfoque claro se fundamenta en mi responsabilidad única como estudiante de aprender claramente los conceptos de las clases y contempla una realidad fundamental: puedo alcanzar mis metas y depende únicamente de mi, no depende de los profesores, ni de mis padres, ni del colegio que yo alcance un buen resultado, únicamente depende de mi esfuerzo y dedicación.
Conforme avanzo en mis temas de estudio es bueno hacer una autoevaluación, de esa forma concentro mis esfuerzos y mantengo una idea clara sobre los contenidos que voy recordando en cada periodo de revisión.
Como recomendación final es importante que nos demos crédito +por alcanzar las metas propuestas, si en un caso puntual, cuando finalice mis estudios, puedo felicitarme o darme un pequeño premio que simbolice la meta alcanzada de preparación.
Si tienes más dudas, puedes consultar con tu líder de grupo o con nuestro equipo de orientación, el cual está siempre disponible para apoyarte ante cualquier duda académica u emocional que puedas tener.
Escrito por Carmen Helena Martínez y Nicolás Contreras